Block, K. I., & Mead, M. N. (2003). Immune system effects of echinacea, ginseng, and astragalus: a reviewIntegrative cancer therapies, 2(3), 247-267.

La medicina herbal tradicional proporciona varios remedios para fortalecer la resistencia del cuerpo a las enfermedades a través de los efectos sobre los componentes del sistema inmunológico.

Este artículo de revisión examina 3 estimulantes inmunes herbales populares que a menudo son de interés para los pacientes con cáncer. La equinácea, originaria de América del Norte, se usa ampliamente para prevenir o proporcionar un tratamiento temprano para los resfriados.

Los estudios preclínicos otorgan plausibilidad biológica a la idea de que la equinácea funciona a través de mecanismos inmunes. Se han realizado numerosos ensayos clínicos sobre preparaciones de equinácea: parece que los extractos acortan la duración y la gravedad de los resfriados y otras infecciones de las vías respiratorias superiores (URI) cuando se administran tan pronto como los síntomas se vuelven evidentes. Sin embargo, los ensayos sobre el uso a largo plazo de la equinácea como preventivo no han mostrado resultados positivos.

El ginseng se ha estudiado con cierta profundidad como agente antifatiga, pero los estudios de los mecanismos inmunes no se han llevado a cabo hasta ahora. La evidencia preclínica muestra cierta actividad inmunoestimulante. Se han realizado varios ensayos clínicos en una variedad de enfermedades diferentes.

El astrágalo es el agente menos estudiado. Hay algunos ensayos preclínicos que muestran una actividad inmune intrigante. Las hierbas discutidas parecen tener perfiles de seguridad satisfactorios.

Los pacientes con cáncer pueden desear usar estos ingredientes botánicos para inhibir el crecimiento tumoral o para aumentar la resistencia a las infecciones. Sin embargo, es poco probable que la inmunoterapia pasiva con hierbas, sin mecanismo para exponer antígenos tumorales, sea efectiva para inhibir el crecimiento tumoral.

Aunque el margen de seguridad para estas hierbas es grande, se necesita más investigación para demostrar el valor claro de usar hierbas para mejorar la resistencia a las infecciones.

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