Kim, Y., Keogh, J. B., & Clifton, P. M. (2017). Benefits of nut consumption on insulin resistance and cardiovascular risk factors: multiple potential mechanisms of actions. Nutrients, 9(11), 1271.
FONDO: Los estudios epidemiológicos y clínicos han indicado que el consumo de frutos secos podría ser una estrategia dietética saludable para prevenir y tratar la diabetes tipo 2 (DM2) y las enfermedades cardiovasculares relacionadas (ECV).
OBJETIVO: El objetivo de esta revisión es examinar los posibles mecanismos de acción de los frutos secos que abordan los efectos sobre el control glucémico, el control del peso, el equilibrio energético, el apetito, la modificación de la microbiota intestinal, el metabolismo de los lípidos, el estrés oxidativo, la inflamación, la función endotelial y la presión arterial, con especial atención a datos de estudios en animales y humanos.
RESULTADOS: Los efectos favorables de las nueces podrían explicarse por la composición única de nutrientes y los compuestos bioactivos en las nueces. Los ácidos grasos insaturados (ácidos grasos monoinsaturados y ácidos grasos poliinsaturados) presentes en los frutos secos pueden desempeñar un papel en el control de la glucosa y la supresión del apetito. La fibra y los polifenoles de las nueces también pueden tener un efecto antidiabético al alterar la microbiota intestinal. Los frutos secos reducen el colesterol sérico al reducir la absorción de colesterol, inhibir la HMG-CoA reductasa y aumentar la producción de ácidos biliares mediante la estimulación de la 7-α hidroxilasa. La arginina y el magnesio mejoran la inflamación, el estrés oxidativo, la función endotelial y la presión arterial.
CONCLUSION: En conclusión, los frutos secos contienen compuestos que influyen favorablemente en la homeostasis de la glucosa, el control de peso y la salud vascular. Se requieren más investigaciones para identificar los mecanismos más importantes por los cuales los frutos secos reducen el riesgo de DM2 y ECV.